Sin duda ha regresado el PRI y uno de los mejores parámetros para deducirlo es que los medios están más voraces que antes (durante la docena trágica del PAN).

Ya hablamos de la rapiña periodística de Loret y Gómez Leyva criminalizando y desacreditando movimientos y marchas contra Enrique Peña Nieto durante el pasado primero de Diciembre; y lo que es peor, continuara. Los medios al servicio del poder no se renuevan, pasan la estafeta pero nunca evolucionan, en el 68 fue Zabludovsky, ahora son Marín, López-Dóriga y compañía.

Pero el descredito ya no es solo contra movimientos sino también para personas públicas que los apoyan, en este caso el blanco de las «críticas» fue Epigmenio Ibarra.

Escribía López-Dóriga en una de sus columnas titulada «Les urgía un muerto» refiriéndose a los tuits sobre fallecidos durante las protestas del #1DMx «Y es que a Monreal lo engañaron. Se dejó ir con la falsa información que se atribuyó a Epigmenio Ibarra, simpatizante del movimiento, y el diputado, como el realizador de tv, incumplieron un principio básico del periodismo: confirmar la nota.»

Posteriormente Epigmenio Ibarra hizo la aclaración que la información de la persona fallecida era errónea. Y remata López Dóriga «La concatenación de esta versión dejó ver que hay a quien le urge un muerto, una víctima que tirar a la puerta de Palacio Nacional y luego velar en el Zócalo. De lo contrario no podría entender la prisa del primer muerto.»

En respuesta a López Dóriga, Epigmenio Ibarra respondería en una columna publicada en Milenio A mí no me “urge el muerto”  «En estas mismas páginas Joaquín López-Dóriga y Carlos Marín me han acusado de manipular políticamente una tragedia. De la “patraña” de Epigmenio escribió Marín mientras que López-Dóriga dijo que a Ricardo Monreal y a mí nos “urgía el muerto”.

Y dirigiéndose a ambos «periodistas» menciona «Suponen ambos, con mentalidad más policiaca que periodística y actuando en los hechos como coadyuvantes del MP, que tanto Monreal como yo somos “la mano que mece la cuna” detrás de los graves sucesos del primero de diciembre.»

Y finaliza diciendo «No fue una patraña ni una maniobra. Reporteaba lo que sucedía y los videos que grabé dan fe de cómo y desde dónde lo hacía. También mis tuits que dan cuenta del escalamiento de la confrontación y de mi pesar por cubrir en mi país este tipo de hechos.

Me equivoqué, es cierto, y rectifiqué. Se equivocan López-Dóriga y Marín sin que, por cierto, corrijan todavía sus dichos y acusaciones infundadas.»

Es aquí cuando podemos ver quienes están al servicio del régimen, que sin escrúpulos y con todo lo que tengan a la mano (en sentido figurado) señalan y acusan a quienes no están alineados con los oligarcas.

Posterior a esto, el lunes leía en Milenio la columna de Carlos Marín «El asalto a la razón» (y como anillo al dedo, porque razón no dejan ni rastro) que se titulaba «Un 2 de octubre patito» también haciendo alusión al primero de diciembre. Citare algunas líneas que considero fundamentales.

«Dos hechos combinados con la liberación ayer «por falta de elementos para procesar» de la mayoría de quienes fueron consignados por su probable responsabilidad en el vandalismo de hace dos sábados y el anuncio previo de que la procuraduría capitalina no impugnara la resolución del juez 47 penal (María del Carmen Mora Brito), confirman lo que no puede ser justa pero si muy explicable concertación entre los poderes Ejecutivo y Judicial del DF con el nuevo gobierno federal»

Esto corresponde al primer  párrafo de su columna y cabe destacar algunaspalabras en concreto «vandalismo», y el entrecomillado de «por falta de elementos para procesar»; es decir, para Marín todos los detenidos son vándalos, pero no dice que muchos de ellos fueron detenidos ilegalmente y se demostró su inocencia, ese entrecomillado deja ver como pone en tela de juicio la inocencia de las personas liberadas. Es cierto, sigue la criminalización de las marchas y la oposición.

El segundo párrafo es por decirlo de una manera, más lamentable que el primero al declarar que «Es lo que con ganas de comprender, se antoja una inteligente «decisión de estado» tanto para despresurizar las inconformidades (legítimas o artificiales), como para desfondar lo que hiede a un plan deliberado para convertir la ponzoñosa anécdota de 1 de diciembre del 2012 en la tragedia nacional del 2 de Octubre»

Entendiendo a Marín, para él los que ocasionan las matanzas son los manifestantes ¿Ahora niéguenme que esto no es criminalizar o desacreditar las manifestaciones? Los manifestantes no son los que portan armas (sean balas de plomo o de goma), a fin de cuentas los que tienen las armas son «las fuerzas del orden público» Recordemos que en 68 quienes dispararon no fueron los estudiantes, fue el batallón Olimpia, este año, los que hicieron desmanes fueron los grupos infiltrados dentro del movimiento y policías vestidos de civiles (ya existen fotos).  Pero eso sí, menciona en otro párrafo «Quedarán en el olvido los 20 policías de la Secretaría de Seguridad Pública del DF que tuvieron que recibir atención en el hospital Álvaro Obregón; seis más en el Mocel y cuatro en el del estado mayor presidencial» Pobres policías, denles más toletes, mas armas y mas escudos, no vayan a sufrir mucho. Marín, uno de los brazos más incesantes contra los opositores, y esto seguirá al menos, los próximos 6 años.

Otros de los párrafos a resaltar son las declaraciones de marín haciendo referencia a Epigmenio Ibarra «Entre los “argumentos” de quienes, sin esperar a que transcurrieran los plazos de ley para que las autoridades implicadas pudieran hacer su trabajo, condenaron tanto las detenciones iniciales como las consignaciones, sobresale la tontería de suponer que las acusaciones, en todos los casos, debieron ser avaladas con fotografías o videos donde se viera a los probables vándalos (como si los delitos en todos los tiempos y en todo el mundo se cometieran ante las cámaras).» Tal vez al señor Marín no lo haya alcanzado la época tecnologia o igual es un ignorante en la materia, pero tendríamos que decirle que muchos de los manifestantes en los diversos puntos en los que hubo protestas, registraron los hechos con sus camaras digitales y celulares; en pocas palabras, si hay imagenes pero no prueban nada a pesar de que se ven claramente y no se pueden tomar en serio porque por autonomasia o por ley natural los delitos no se habian grabado anteriormente. Y como siempre, queda ese pequeño gran detalle. Para los medios nacionales no hay nada que pruebe la represión, pero medios internacionales como Telesur dieron la noticia y pasaban las imagenes de los hechos del primero de diciembre.

Les anexo los links para las columnas de Joaquín López-Dóriga, de Carlos Marín y al de Epigmenio Ibarra.

http://www.radioformula.com.mx/notas.asp?Idn=288671

http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9166790

http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9166562

Podríamos decir que «hay personas con precio y otras con valor», Marín y López no entran en la segunda categoría. Seguimos poniendo el dedo en la llaga, los medios jugarán un papel importante en el desarrollo social durante los próximos 6 años, jugando un papel primordial como instrumento de control y manipulación.